Rome, Italy. El 12 de junio de 2023, los directores de los seis Institutos Claretianos de Vida Consagrada encontraron para trabajar tres temas principales: compartir experiencias, reflexionar sobre el compromiso del último Capítulo General de coordinar los institutos y el definir un proyecto común para vincularse más estrechamente.
En la reunión participaron los CMFF: el P. Henry Omonisaye, del Gobierno General y Presidente de la Junta de Directores; P. Cristo Rey Paredes, miembro de la Comisión; P. George Lanithottam, Secretario Ejecutivo; P. Maurizio Bevellaqua, de Claretianum; Antonio Bellella, del ITVR Madrid; P. Antonio Santillan, representando al ITVCA, Bogotá; P. Gusti Supur, del ICLA, Manila; P. Peter Okonywo, del InCLA, Abuja, Nigeria; y P. M. Arul Jesu Robin, del Sanyasa ( ICLS ), Bangalore.
El primer día se dedicó a presentaciones de cada instituto, permitiendo un intercambio de experiencias e ideas. En el segundo día, se abordó la visión del Capítulo General XXVI y la reflexión del Papa Francisco sobre las Universidades e Institutos Pontificios. También se trabajó sobre la misión Claretiana y el “Tercer Proyecto de Misión”, con una intervención en esta línea del P. Mathew Vattamattam, Superior General de la Congregación de los Misioneros Claretianos.
En el tercer y último día, se presentó un proyecto para vincular todos los institutos Claretianos bajo el liderazgo del Claretianum (Instituto de Vida Consagrada situado en Roma). También se dedicó un tiempo a estudiar el “Manifiesto Corporativo” que el Gobierno General deberá aprobar.
Algunas propuestas significativas surgieron durante la reunión: mantener el compromiso del Capítulo de vincular los seis institutos en el espíritu de Vertatis Gaudium, la publicación de un Diccionario de Vida Consagrada en inglés, y continuar con la investigación y publicación de libros sobre la vida consagrada en inglés.
Esta reunión de los Institutos Claretianos de Vida Consagrada continúa aportando a este sueño que la Congregación tiene para 2027, que en su última parte recoge:
Soñamos una Congregación preparada para responder a los nuevos desafíos a través de un proceso formativo integral y continuado, abierto a la misión universal, según el espíritu y el carisma de nuestro Padre Fundador.