El 10 de octubre de 2021, Su Santidad el Papa Francisco inauguró oficialmente el proceso sinodal, que finaliza en octubre de 2024. El Sínodo, cuyo objetivo es que el pueblo de Dios se escuche mutuamente, ha experimentado un proceso desafiante pero fructífero de consulta, diálogo, encuentro y camino en el espíritu de comunión y discernimiento. La PALABRA DE DIOS es el corazón de este proceso sinodal, el fundamento de la misión de la Iglesia. Al proclamar la Palabra de Dios en este sínodo, se nos recuerda constantemente el papel vital que desempeña en la vida pastoral de la Iglesia y la comprensión de nuestra fe mientras buscamos continuamente la voluntad de Dios en nuestras vidas.
El tema de la Conferencia de la Palabra 2023 es LA PALABRA DE DIOS: «Una fuente de agua en tierra seca, brotando para la vida eterna«. (Jn 4,14). Al embarcarnos en el proceso sinodal, es esencial anclarnos en la Palabra de Dios, que es como una fuente de agua que saciará nuestra ardiente sed de verdad y reconciliación. Así como el sínodo nos invita a escuchar y dialogar, también debemos permitir que la Palabra de Dios penetre en nuestros corazones para discernir lo que el Espíritu Santo nos dice.
La Biblia, la PALABRA DE DIOS viva, contiene muchos pasajes en el Antiguo y Nuevo Testamento que reflejan la esencia del sínodo: «caminar juntos». En el Antiguo Testamento, como Israel, el pueblo de Dios vagando hacia la Tierra Prometida, Yahvé les recuerda constantemente que Él está en medio de ellos y camina entre ellos (cf. Lv 26, 12; Dt 23, 14; Is 41, 10). Por otra parte, el Nuevo Testamento describe a Jesucristo como imagen del Dios invisible (cf. Col 1,15; 2 Co 4,6), que se hizo carne y habitó entre nosotros (Jn 1,14). Al igual que en el camino a Emaús, Jesús continúa caminando con nosotros y enseñándonos la verdad tal como se revela en las Escrituras.
La sinodalidad es entablar un diálogo auténtico dentro y más allá de los límites sacramentales de la Iglesia. Participar en el proceso sinodal enfatiza la importancia de la disponibilidad para abrir y acoger la Palabra de Dios en nuestras vidas. Venimos a dialogar con un corazón humilde, entendiendo la importancia del amor y el perdón de Dios. (Sal 51:10-12) Sólo para entonces podemos, como pueblo de Dios, caminar juntos por el camino de la sinodalidad. (Lucas 24-17) Mientras caminamos juntos, el Señor en los Evangelios nos invita constantemente a discernir, renovar y acostumbrarnos a los signos de los tiempos (Mateo 24:3-31). Además, nunca debemos olvidar que al acercarnos a Dios, tenemos a la Santísima Virgen María, nuestra madre (Lucas 1:42-46), que está allí caminando con nosotros e intercediendo por nuestras necesidades (Juan 2:5).
Los Misioneros Claretianos en Filipinas (Fr. Rhoel Gallardo Province), bajo el cuidado de la Prefectura de Animación y Comunicación Bíblica y la Fundación Claretiana de Comunicaciones, Inc., inicia este evento, que espera iniciar el diálogo y abrir más espacios de conversación para comprender mejor la importancia de este sínodo en la vida de los fieles y de la Iglesia.
Para obtener más información sobre el evento, visite http://www.wordcon.ph/