Santiago de Cuba, Cuba. La exposición «Claret, 170 años de su llegada a Cuba» finalizó el 12 de marzo de 2023. Organizada por el Arzobispado de Santiago de Cuba y ubicada en sus instalaciones, fue fruto de la colaboración estrecha con los misioneros claretianos. Su objetivo: acercar la figura de San Antonio María Claret y su historia a la sociedad actual.
La exposición, que fue inaugurada el uno de febrero, presentó la vida y misión de San Antonio María Claret, así como la fe del pueblo y su historia local y regional en el contexto actual. Durante un mes y medio, muchas personas visitaron la exposición para conocer la obra vasta e impactante del santo.
El proyecto fue fruto del trabajo de más de dos años de un equipo de personas entre las que se encuentra el P. Camilo de la Paz Salmón Beatón, párroco de Santa Lucía. La frase pronunciada por el Papa Pío XII en la canonización de Claret, «San Antonio María Claret, semejante al corazón de Jesús», fue el hilo conductor del proyecto. Mons. Dionisio García, Arzobispo de Santiago de Cuba, mencionó que la intención original era interesar a todos en la vida de Claret y su misión como Arzobispo.
San Antonio María Claret en Cuba
Arzobispo de Cuba
El 16 de julio de 1849, funda en una celda del seminario de Vic (España), la Congregación de los Misioneros Hijos del Inmaculado Corazón de María. La gran obra de Claret comienza humildemente con cinco sacerdotes que comparten su mismo espíritu. Pocos días más tarde, el 11 de agosto, comunican al P. Claret su nombramiento como Arzobispo de Cuba. A pesar de su resistencia y sus objeciones a cuenta de la Librería Religiosa y la recién fundada Congregación de Misioneros, aceptó el cargo por obediencia y fue consagrado en Vic el 6 de octubre de 1850.
Se preocupó de la renovación espiritual y pastoral del clero y la fundación de comunidades religiosas. Para la educación de la juventud y el cuidado de las instituciones asistenciales logró que los Escolapios, los Jesuitas y las Hijas de la Caridad establecieran comunidades en Cuba; con la María Antonia París fundó las Religiosas de María Inmaculada Misioneras Claretianas el 27 de agosto de 1855. Luchó contra la esclavitud; creó una Granja-escuela para los niños pobres, creó una Caja de Ahorros con marcado carácter social, fundó bibliotecas populares. Tanta y tan diversa actividad le supuso muchos enfrentamientos, calumnias, persecuciones y atentados. El sufrido en Holguín (1 febrero 1856) le hizo derramar su sangre por Cristo y estuvo cerca de costarle la vida.
Fuente | Arzobispado de Santiago de cuba