Colmenar Viejo, Madrid. En dos turnos distintos de prácticamente dos jornadas, cerca de setenta misioneros claretianos de la Provincia de Santiago han compartido unos días de convivencia en Colmenar Viejo aprovechando los días de Navidad. Siguiendo un programa que ya cuenta con cierta tradición en la provincia y que pretende salir al paso de las necesidades de cada etapa de la vida, quienes tienen entre 60 y 70 años y los menores de 60 se reunieron para abordar esas cuestiones específicas, revisar su estilo de vida a la luz de las últimas indicaciones de la Iglesia y tomar el pulso a la vida misionera de la provincia. Los encuentros incluyeron tiempos muy agradables de convivencia con los claretianos que viven en Colmenar, jóvenes y mayores, y una celebración pausada de la liturgia de estos días.
Aunque la media de edad de la Provincia es elevada es una bendición del Señor contar también con estas decenas de misioneros más jóvenes, repartidos por las cuatro naciones en las que está presente la Provincia. La participación de los hermanos destinados en París, Zürich y la Misión de Rusia ha sido especialmente celebrada. Los cuatro miembros del equipo Fragua, residentes en Los Negrales, participaron también en los encuentros, acompañados en todo momento por el Gobierno Provincial.
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