Ofrecemos el texto de la carta que el Superior General, P. Josep M. Abella, ha dirigido desde la India a los Misioneros Claretianos de la Delegación de Antillas de la que Haití forma parte.
Chennai, 14 de enero, 2010
Queridos hermanos de la Delegación de Antillas:
Estos últimos días estamos todos pendientes de la situación en Haití. Son muchas las personas que han perdido
la vida o que están llorando la muerte de sus familiares y amigos. Las imágenes de los medios de comunicación social nos dejan sumidos en una sensación de profundo dolor y de cierta impotencia. Esperamos que muchas organizaciones internacionales sepan responder generosamente a la tremenda situación que se vive en este país. Nosotros estamos intentando hacer lo que podemos y, tal como nos ha indicado el P. Héctor Cuadrado, procuraremos canalizar nuestras ayudas a través de PROMICLA de Puerto Rico.
Nuestro pensamiento va de un modo especial hacia los dos claretianos que, en este momento, se encuentran en Haití al lado de su gente. PP. Anistus Onuoha y P. Beauplan, os quiero asegurar que estáis presentes en el corazón y en la oración de cada uno de nosotros. Los otros dos miembros de la comunidad, PP. Aníbal Zilli y Joachim Grendotti, se encuentran en sus propios países por motivo de sus vacaciones. Desde el primer momento nos hemos sentido todos preocupados por vuestra situación, PP. Anistus y Beauplan. Nos ha alegrado saber que estáis bien y que estáis compartiendo minuto a minuto el sufrimiento de vuestra gente. No dejéis de consolar y de mantener viva la esperanza de todos. Estoy seguro que vuestro testimonio de acogida y cercanía a todos será el mejor mensaje. Nos sentimos también muy cercanos a los otros claretianos haitianos y seguimos preocupados esperando noticias que nos aseguren que sus familiares están bien.
Quiero agradecer al P. Rogelio su interés en hacerse presente inmediatamente para ver cómo estaban nuestros hermanos y llevarles el abrazo de todos nosotros. Sé que el P. Héctor y el P. Alexis están intentando acercarse también a Port au Prince. Ellos les harán sentir la solidaridad de todos los claretianos y buscarán, junto con ellos dos, el modo más adecuado de canalizar las ayudas que muchos claretianos y otras personas cercanas a nosotros quieren hacer llegar a Haití. Esperamos impacientes sus noticias.
Quiero testimoniar mi cercanía a todos los miembros de la Delegación de Antillas. Hace todavía poco tiempo tuvisteis que acompañar el sufrimiento del pueblo haitiano a causa del tifón que causó tanta destrucción, sobre todo en la parroquia de Kazal. Ahora os toca afrontar la terrible prueba que va a suponer este terremoto. Os sentimos muy cercanos y queremos que nos sintáis cercanos a todos. Estoy seguro que sabréis encontrar el modo concreto de expresar la solidaridad a quienes necesitan ahora de una forma más urgente este gesto.
No cesa nuestra oración al Padre de todos para que nos haga capaces de ser signos e instrumentos de su amor. Aquí, en Chennai, os estamos recordando constantemente. Estad seguros de nuestra oración y de nuestro compromiso de ayuda.
Un abrazo fraterno,
Josep M. Abella, cmf.
Superior General