EL AMOR: UN MOVIMIENTO CONMOVEDOR

«Se acercó a él y vendó sus heridas…» (Lucas 10:34)

Carta vocacional de Yohanes Mangge CMF

Introducción

La acción real y el saludo al otro son una misión de vida que no debe detenerse en el nivel de las palabras. Más que eso, «…fueron a él y vendaron sus heridas…» es una misión compartida que debe unirse en cada hijo de Dios, para que la historia del amor de Dios no se detenga, sino que continúe. La continuidad de la historia de amor de Dios se hará realidad si cada ser humano tiene el valor de bajar, salir de su zona de confort y vendar las heridas de los que están heridos.

El buen samaritano: un modelo que se atreve a salir de la zona de confort

La historia presentada por Lucas sobre el Buen Samaritano es un relato que describe un movimiento de bajada, de salida de uno mismo y de saludo a los demás. Es una escuela de amor que nos deja lo que es el verdadero amor. El comportamiento amoroso mostrado a través del samaritano en mi opinión es un ejemplo de personas que se atreven a salir de su zona de confort. Con un corazón abierto bajó y vendó las heridas de las personas que encontró. Para mí, la zona de confort del samaritano es él mismo. Es muy posible que se sintiera menos obligado a vendar las heridas de la víctima, o a dejarla a su suerte. Pero en la historia que se muestra, él sale de su zona de confort, sale de su ego personal y se acerca y venda la herida de la víctima. Deja de lado su zona de confort y su ego personal por algo más elevado y noble. Este acto es un acto de transformación tanto para él mismo, es decir, que tiene una alta autoestima, como para nosotros como oyentes de la historia, es decir, que estamos invitados a cambiarnos a nosotros mismos en la medida de lo posible, tanto en la perspectiva como sobre todo en la acción real.

Conectar con mi historia como formador

La historia del buen samaritano me inspiró realmente a reflexionar sobre el significado más profundo de mi vocación como formador. Cuando reflexioné sobre esto, llegué a un punto, a saber, que la llamada a ser formador es un momento para bajar y salir de tu zona de confort e ir a compartir historias de amor y aprender a tejer el amor con los formandos. En relación con la historia del buen samaritano y la continuación de mi historia como formador, no quiero decir que los formandos sean personas heridas o enfermas. Sitúo a los formandos como un espacio en el que se me exige que me atreva a salir de mi zona de confort para estar juntos, compartir juntos y construir juntos una buena fe en Dios.

Servir con el corazón fue mi objetivo inicial para llevar a cabo mi vocación de Misionero Claretiano. Esto no puede separarse de la experiencia de vida de San Antonio María Claret. Claret subraya la importancia de un espíritu maternal en el servicio al pueblo de Dios. El corazón de una madre es un corazón lleno de amor al guiar y educar a sus hijos para que puedan crecer y desarrollarse como una persona completa. Con todas mis fuerzas y limitaciones, intento tocarlos, saludarlos con mi corazón. En el camino de mi vocación, que tengo y estoy viviendo actualmente, he conocido varios rostros con diferentes orígenes y caracteres. Estar con los formandos fue una experiencia que realmente resonó en mi corazón. Con ellos tejí historias, especialmente historias sobre la vocación como Misionero de Dios. En la convivencia con ellos también trato de presentar algo que pueda ayudar al desarrollo de la fe a través de compartir las escrituras, compartir las vocaciones, el auto examen a través de los recuerdos, a través de rezar juntos, trabajar juntos, hacer deporte juntos, y varias otras dinámicas de la vida comunitaria que nos ayudan a crecer en esta vocación. De ellos obtuve muchas cosas, y el tesoro más hermoso que obtuve fue la fraternidad en el amor. Siempre espero que mi presencia pueda llevar el amor de Dios a los ojos de los formandos. Para ello, con todo mi ser traté de presentar algo bueno aunque fuera una pizca, para que al final vieran que había Otro detrás de mí. Entonces les pregunté si habían experimentado esto ¿He dejado el amor de Dios en sus corazones? ¿Experimentaron que realmente salí de mi zona de confort?

 

Yogyakarta (Indonesia)

31 de mayo de 2022.

Traducido por DeepL

Revisado por Mario Kevin R. Armijo CMF

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