Roma. Hoy, 16 de Septiembre de 2015 el XXV Capítulo General “Testigos y Mensajeros de la Alegría del Evangelio” escribió su última página.
Después de la oración y el desayuno, los Capitulares se reunieron en el Aula para tratar los asuntos finales. En primer lugar, la comisión de evaluación presentó el resultado de la encuesta realizada el día de ayer. Según su comentario, el equipo de redacción y el secretario del capítulo, merecieron un especial reconocimiento, por su cualificado servicio. En seguida, el P. Rosendo Urrabazo CMF, por petición del P General, agradeció a todas las personas que participaron en una comisión e hicieron posible el desarrollo del Capítulo. En la lista incluyó a los Misioneros que colaboraron en las traducciones, tanto desde la misma sede del Capítulo, como desde Inglaterra, Francia, Estados Unidos, España e Italia.
El
Mensaje Final del P. General del Padre General marcó el momento cúspide de este día. Al inicio subrayó que el Capítulo debe significar para todos los participantes un Pentecostés especial y, al igual que María y los apóstoles, deben salir a sus organismos marcados por la alegría. Continuó invitándoles a ser ellos mismos la interpretación del documento capitular con sus hermanos. También pidió a los capitulares llevar su saludo y abrazo a todos los misioneros empezando por los enfermos y ancianos; de manera especial pidió saludar a los jóvenes que se preparan para la misión. El P Mathew Insistió en expresarles su agradecimiento por la respuesta generosa que están dando al Señor. También integró en su abrazo a los laicos cercanos a la Misión Claretiana.
Después de preguntar y constatar que los todos asuntos capitulares previstos se habían tratado, el P General declaró oficialmente la conclusión del Capítulo. En seguida, por solicitud del secretario capitular, los asistentes firmaron las actas del Capítulo. Y al final, para agradecer a Dios por el éxito del Capítulo, participaron en la Eucaristía, presidida por el mismo P. Mathew Vattamattam. Lo acompañaron en el altar los PP. Aquilino Bocos y Josep M Abella, Superiores Generales precedentes.