Roma, Italia. El Instituto Claretianum de Teología de la Vida Religiosa se constituye, mediante decreto de la Congregación para la Educación Católica, en fecha 6 de junio de 1971. Era el primer Instituto con dicha especialización en la Iglesia. Pero la iniciativa venía de mucho antes. El Capítulo General de 1934 decidió abrir un Colegio Internacional en Roma. Al año siguiente comienza, en tiempos difíciles, la crisis económica del 1929 no superada, la guerra civil española y la segunda guerra mundial. Terminada ésta, el Capítulo General de 1949 renueva el propósito. Será el Revmo. P. Peter Schweiger quien logre inaugurar el edificio en Via Aurelia y dar comienzo al primer año académico el 15 de octubre de 1959. Cuatro años después, el 22 de agosto de 1963, el Instituto es agregado a la Facultad de Teología de la Universidad Lateranense. Podía conceder Bachillerato y Licencia en Teología.
Tras el Concilio Vaticano II, se promulgó la reforma de los estudios con el documento Normae quaedam (1968). Imponía determinar la Licencia en Teología y se decidió asumir la especialidad en Vida Religiosa. El Decreto de creación (1971) aceptó la solicitud presentada por el Rev.mo P. Antonio Leghisa. Podían obtenerse los grados de Licencia y Doctorado. Una solemne concelebración, presidida por el cardenal Arcadio Mª Larraona, significó la ceremonia de apertura, el 24 de octubre de 1972. Formaban el claustro veinte profesores claretianos, con el director P. Alois Hornung, a quienes se añadían cinco religiosos de otras congregaciones y una psicóloga laica. Actualmente sólo diez profesores son claretianos, siete de la comunidad que sirve al Centro. Sobre un total de 48, los externos son absoluta mayoría. El hecho siempre fue visto como una misión compartida, que refleja la pluradidad cultural y de pertenencia.
Algunos datos apoyan esta realidad. Los grupos que han pasado por el Instituto son 323: desde antiguas órdenes hasta nuevas formas de vida consagrada. Las naciones de proveniencia son 103, de los cinco continentes. Los inscritos en el Curso Académico fueron, 6.503; en el Curso Anual, 6.994. La mayor parte de nuestros egresados ejercen oficios de formación o gobierno. Hay buen número de Superiores / Superioras Generales, algunos obispos misioneros y otros cargos eclesiales; el más reciente João Gutemberg Sampaio fms, secretario ejecutivo de la Red Eclesial Panamazónica.
Para el curso 1987-88, el Rev.mo P. Gustavo Alonso y el director P. José Rovira tomaron la valiente decisión de reintegrar el Claretianum al edificio en Via Aurelia. Dejando el centro por la periferia, los alumnos aumentaron. En 1996, el director P. Matías Augé obtuvo el cambio de nombre a Instituto de Teología de la Vida Consagrada. También se amplió la oferta académica. Recibiendo una propuesta del director P. Santiago Mª González Silva, la Congregación para la Educación Católica aprobó conceder el Máster en Teología de la Vida Consagrada (2003) y el Máster en Economato de Entes Eclesiásticos (2005). Un centro de escucha, con atención psicológíca fue impulsado por el director P. Jesús Mª Alday.
No obstante sus reducidas dimensiones, dentro del contexto académico romano, el Claretianum es considerado de referencia en su especialidad. El director P. Matías Augé participó en el Sínodo sobre la Vida Consagrada (1994). Las dos primeras Subsecretario de la Congregación para la Vida Consagrada, Sr. Enrica Rosanna fma y Sr. Nicla Spezzati asc, fueron nombradas siendo profesoras en el Instituto. Entre los profesores se cuentan seis consultores de la misma Congregación. Desde la Exhortación Vita Consecrata (1996) hasta las orientaciones Para vino nuevo odres nuevos (2017) han colaborado en dichos documentos. Las Semanas de Vida Consagrada, en fechas previas a la Navidad, son una tribuna prestigiosa que anualmente marca la agenda para muchas comunidades romanas.
Hace 25 años el cardenal Aquilino Bocos resaltó como notas características del Claretianum «la eclesialidad, la atención a los signos de los tiempos y su compromiso por mantener el estudio de la vida consagrada a nivel universitario». Actualmente, bajo la dirección del P. Xabier Larrañaga, en completo recambio del grupo fundador, todas las posibilidades quedan abiertas. Como ha escrito el Revmo. P. Mathew Vattamattam: «Esperamos que sea un tiempo de renovado y mejor servicio misionero a los consagrados». El punto clave será siempre la convencida entrega al mismo.
Santiago Mª González Silva, cmf
