Managua, Nicaragua, y Tela, Honduras. Diciembre de 2024 marcó hitos significativos para la comunidad claretiana con las ordenaciones de Fabio Antonio Rivas, CMF, en Managua, y David Martínez Gómez, CMF, en Tela, celebradas en ceremonias llenas de fe, alegría y gratitud.
La ordenación de Fabio Antonio Rivas, CMF, tuvo lugar el 4 de diciembre de 2024, en la Parroquia Guadalupe Corazón de María en Managua. La ceremonia fue presidida por el Cardenal Leopoldo Brenes y reunió a familiares, amigos, clero y feligreses. El Padre Carlos Salvador Menjívar, CMF, Superior de la comunidad claretiana en Nicaragua, presentó al Padre Rivas para su ordenación. «Dios ha estado grande con nosotros, y por eso estamos alegres,» resonó a lo largo de la celebración, significando una renovada presencia pastoral en una parroquia que había vivido un periodo sin sacerdote residente.
En su homilía, el Cardenal Brenes expresó su gratitud hacia los Misioneros Claretianos por su dedicación y animó a los feligreses a apoyar a su nuevo sacerdote. El Padre Rivas, en sus palabras de gratitud, declaró: «Aquí estoy, Señor; envíame,» reafirmando su compromiso de servir a su comunidad como Hijo del Corazón de María.
El 14 de diciembre de 2024, en Puerto de Tela, en la Parroquia San Antonio de Padua, David Martínez Gómez, CMF, fue ordenado por el Obispo Ángel Garachana Pérez, CMF. La celebración irradiaba el carisma claretiano, reuniendo a los fieles, Misioneros Claretianos, la Fraternidad de María y los Padres Eudistas en un ambiente familiar lleno de cantos de alegría y gratitud.
«Mística y poesía, San Juan de la Cruz, catorce de diciembre qué grande alegría,» describió el momento en que David Martínez Gómez se rindió a Dios y recibió la gracia de la consagración presbiteral. Reflejando sobre el día, los testigos recordaron un momento conmovedor cuando la lluvia simbolizaba lágrimas de alegría del cielo, mientras sus padres veían a su hijo culminar su camino hacia el sacerdocio.
Los Misioneros Claretianos expresaron su gratitud por las vocaciones de los Padres Rivas y Martínez Gómez y oraron para que más trabajadores sean enviados a los campos del Señor. Reafirmaron su misión de proclamar la Buena Nueva con corazones abiertos y dispuestos.
Fuente: E. Onel Antonio Pérez, CMF, y Josué Lemus Cruz, CMF.