Después de las Misiones
de San Pedro y San Pablo, del Luso de (1969 – 1975);
de la Misión de Cangumbe, en el Luso – Moxico – (1969 -1972);
de San Antonio María Claret en Tchamutete – Sá da Bandeira (1972 – 1976);
Misión de Catete, en Luanda (1978- 1980);
nació el 27 de febrero de 1993 la Parroquia del Inmaculado Corazón de María, en la Misión Católica de la Corimba, Arquidiócesis de Luanda.
El Jubileo de los 25 años, es tiempo de alabar a Dios por las bendiciones y gracias derramadas en la historia de esta comunidad parroquial y de nuestra congregación.
A lo largo de un año dimos gracias a Dios por la realidad parroquial que nació y creció en esta zona limítrofe de la ciudad de Luanda. Los Jóvenes Claretianos José Alves, (1º Párroco), el Estudiante Mário Jorge y el Hermano Aquino, animados por el espíritu misionero de Claret, supieron cautivar a los primeros fieles en Cristo. A lo largo de los 25 años, sirvieron esta Parroquia 2 Párrocos, 3 Vicarios parroquiales y más de una docena de otros Claretianos.
Preparamos la clausura de la celebración jubilar con dos semanas de reflexión sobre temas sociales, eclesiales y misioneros, la Novena al Inmaculado Corazón de María y el Sacramento de la Reconciliación.
El 4 de marzo de 2018, tuvimos la alegría de recibir en la Misión Claretiana y en la Parroquia a Su Excelencia Monseñor Filomeno del Nacimiento Vieira Dias, Arzobispo de Luanda, a Su Eminencia Alexandre Cardenal Nacimiento, a Su Excelencia Monseñor Zeferino Zeca Martins, Obispo Auxiliar de Luanda, a Su Excelencia Mons. Anastácio Kahango, Obispo Auxiliar Emérito de Luanda, a Misioneros Claretianos de Luanda y Lubango, a sacerdotes vecinos, a Autoridades Civiles, a Militares, a Benefactores y a una multitud del Pueblo Santo de Dios.
A la celebración solemne siguió el almuerzo fraternal en el patio de los Misioneros Claretianos, servido a todos los que nos honraron con su presencia, en particular, a los parroquianos de los Centros Madre de Dios, Nª Sª de la Asunción / Mussulo, San José y Sa Antonio María Claret.
Luanda, 4 de marzo de 2018
P. Fausto de Carvalho Rosado, cmf