El viernes 17 de mayo, ha concluido la VII Asamblea Ordinaria de la Delegación Independiente de Antillas. Una experiencia, en la que han brotado sentimientos de gratitud y esperanza, y un acontecimiento donde cada misionero ha vuelto a descubrir, soñar, diseñar, asumir y sobre todo comprometerse con una vida misionera desde las propuestas del XXV Capítulo General.
El último día de asamblea estuvo marcado por la presentación y aprobación del documento final que iluminará la vida y misión de Antillas durante el trienio 2019-2022. Como discípulos y misioneros, se invitó a los presentes a bajar de la montaña y volver a los frentes misioneros, tras el compromiso común de ser testigos del Evangelio.
Al finalizar la jornada, el P. Fausto Cruz Rosa, Superior Mayor de la Delegación, agradeció la presencia de todos, y en particular al P. Manolo Tamargo, Delegado del Padre General. Así mismo, se comunicó a los presentes, los siguientes servicios:
- La Prefectura de Espiritualidad, al P. Fausto Cruz Rosa, Superior Mayor.
- La Prefectura de Apostolado y como Vicario, al P. Demuel Tavarez Rosa, Consultor.
- Como secretario, al P. Jairo Antonio Pérez, Consultor y Ecónomo.
- La Prefectura de Formación, al P. José Camilo Minaya.
La asamblea desde un ambiente familiar, cerró en primer lugar, con una breve oración, en horas de la mañana y, segundo lugar, en la tarde con la alegría de compartir y vivir la eucaristía de ordenación diaconal del claretiano Rubén Dide Sylvestre.