Roma, Italia. El título de este encuentro era “En Europa hacia un nuevo estilo sinodal de pastoral con los jóvenes, inspirados por el Sínodo y la exhortación apostólica del Papa <Christus vivit>”.

Los participantes llegaron al lugar de reunión el día 27 de mayo a lo largo de la tarde. Tras los saludos iniciales celebraron la eucaristía, que presidió la Delegación de Italia. Tras ella tuvieron la primera cena y la presentación de los asistentes. En total fueron 19 Misioneros Claretianos provenientes de distintos países europeos: Eslovenia, España, Francia, Italia, Polonia, Portugal y Reino Unido.

El día 28 comenzaron la jornada con la eucaristía a las 7,30 am, presidida por Joseph Raju CMF, presbítero recién ordenado, de la Provincia de Fátima. La primera de las charlas corrió a cargo de la profesora Emilia Palladino, de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Gregoriana. Ella les ofreció una visión amplia de los sujetos que mueven la acción evangelizadora, los “millenials” (nombre con el que se conoce a la generación de jóvenes de 18 a 36 años). Y la relacionó con la exhortación “Christus vivit”, del Papa Francisco.

La segunda charla la impartió el P. Maurizio Bevilacqua CMF, profesor del Claretianum, que compartió con los presentes algunos subrayados de la exhortación “Christus vivit” relacionándolos con la Vida Consagrada.

En la sesión de la tarde se realizaron reuniones por grupos para compartir los ecos de lo escuchado durante la mañana que resultaron muy interesantes. Después de una pausa se dialogó sobre las conclusiones del encuentro del pasado mes de noviembre en Roma sobre la PJV de la Familia Claretiana, intentando concretar algunas de las conclusiones ahí señaladas. Se terminó la tarde con un rosario vocacional animado por el P. Lambert CMF, y, tras las cena, se disfrutó de un rato de fraterna convivencia.

El 29 de mayo presidió la oración de laudes y la eucaristía la Provincia de Santiago. En la primera sesión de la mañana les acompañó el P. Roberto De Luca OFM, que había participado en el Sínodo sobre los jóvenes y que les hizo un elenco de lo que le parecía más importante de la exhortación “Christus vivit”. Tras la exposición se tuvo un diálogo muy enriquecedor.

Tras la comida y el descanso el P. Branco Cestnik CMF, que trabaja en Eslovenia, hizo un recorrido sobre las tendencias religiosas en Europa a partir de su experiencia pastoral. Después de un descanso abordaron con más profundidad los distintos proyectos que se van a poner en marcha a nivel de Familia Claretiana en PJV: acompañamiento personal, curso on line, experiencia misionera, movimiento juvenil claretiano… Antes de cenar cada Organismo Mayor presentó lo que se viene haciendo en la formación de Agentes de PJV. Por último, se estableció la fecha y lugar del encuentro del próximo año, que organizará la Provincia de Santiago en la última semana de mayo y que versará sobre el entronque de la pastoral familiar con la pastoral juvenil.

Después de cenar les visitaron dos jóvenes de Roma, Giovanni y Lisa, que trabajan en la PJ con el P. Lambert CMF. Tuvieron con ellos un intercambio de experiencias y de inquietudes sobre la juventud en Roma y en Europa. Algunos de los asistentes tuvieron la oportunidad de acercarse a la Ciudad del Vaticano, pudiendo disfrutar así de “Roma by night”.

El día 30 salieron en peregrinación hacia los lugares franciscanos de Rieti, a unas 2 horas de Roma, en la que pudieron recorrer varios santuarios franciscanos denominados “menores”: Greccio, Poggio Bustone y Fonte Colombo. Celebraron la Eucaristía en uno de ellos y sobre las 18,30h regresaron a la residencia. En la cena les acompañó el P. General, Mathew Vatamattan CMF, con el que pudieron compartir un rato de conversación, en la que les animó en la vocación misionera al servicio de los jóvenes en clave vocacional.

A la mañana siguiente fueron regresando escalonadamente a sus lugares de origen con esperanza renovada para continuar en el empeño misionero con los más jóvenes.

Los participantes agradecen especialmente a la Delegación de Italia por su acogida y el esmero con el que ha preparado este encuentro. Unidos en el Corazón de María, se hace necesario dar gracias por la fraternidad vivida estos días y por haber compartido las preocupaciones y esperanzas misioneras.