En una muestra global de fe y cuidado por el medio ambiente, las comunidades claretianas de todo el mundo han unido sus manos para marcar el Tiempo de la Creación, un mes de celebración dedicado a la oración, la reflexión y las acciones concretas para la conservación y protección de la preciada ecología del planeta.

La Provincia de St. Thomas de los Claretianos en la India inició el Tiempo de la Creación con una profunda oración en el Centro de Formación St. Claret en Josepuram, Kerala. El evento, organizado por el P. Lijo Thundyil, CMF, promotor de JPIC de la Provincia. En ella presentó las bases para una serie de iniciativas destinadas a salvaguardar el medio ambiente.

Una celebración ecuménica mundial: El Tiempo de la Creación, una celebración ecuménica mundial, se inició en 1989 cuando el Patriarca Ecuménico Dimitros I proclamó el 1 de septiembre como Día de Oración por la Creación. Esta iniciativa cobró impulso cuando el Consejo Mundial de Iglesias (CMI) amplió la celebración hasta el 4 de octubre, festividad de San Francisco de Asís. En 2015, el Papa Francisco reconoció oficialmente el Tiempo de la Creación para la Iglesia Católica Romana, promoviendo la comunión con la Tierra y la unidad entre todos los cristianos. El tema de este año, “Que fluyan la justicia y la paz”, se inspira en las palabras del profeta Amós: “Que corra la justicia como un río, la rectitud como una corriente inagotable” (Amós 5:24).

Invitación a la Familia Claretiana: Movidos por un espíritu de unidad, la Familia Claretiana de todo el mundo recibió una invitación para participar en esta celebración de un mes de duración. Una oración-reflexión, preparada por el P. Efraín Vásquez, CMF, fue compartida al comienzo del Tiempo (a la que se puede acceder aquí: https://docs.google.com/document/d/1s0e_mf0KaGYFS-1oggzaS_jo3fw6Y-hEateBqaqpiuw/edit) fomentando la unidad entre los claretianos. Los misioneros de Sri Lanka se involucraron activamente en el Tiempo, participando en la apertura online del Servicio Global de Oración. También organizaron oraciones del Tiempo de la Creación en sus casas de formación y ofrecieron formación a las hermanas.

Actuar globalmente: Misioneros claretianos de varias partes del mundo están llevando a cabo iniciativas en materia de ecología. El P. Casimir Mevoungou, CMF, promotor de JPIC de Camerún, dirigió un seminario sobre el cuidado de la creación entre los novicios. En Honduras, el P. César Espinoza, CMF, en colaboración con la Comisión Nacional de Ecología Integral, sensibilizó a través de un breve vídeo y distribuyó folletos informativos (se puede acceder al vídeo aquí: https://drive.google.com/file/d/1TpCd8Na938ADfeKbZIEua_cIXbKn2JCx/view?usp=drivesdk). El P. Franco Torres, CMF, en la República Democrática del Congo, planificó un programa de un mes sobre cuidado y educación ecológica. En Indonesia, los claretianos se centraron en la educación ecológica, mientras que en México prepararon celebraciones significativas para el Tiempo de la Creación.

Cada hoja es una mediación de Dios:

El Papa Francisco afirma que las crisis a las que se enfrentan las personas y el planeta hoy en día

“no son dos crisis separadas, una medioambiental y otra social, sino más bien una crisis compleja de carácter social y medioambiental a la vez. Las estrategias para solucionarla exigen un enfoque integral para combatir la pobreza, devolver la dignidad a los excluidos y, al mismo tiempo, proteger la naturaleza”(Laudato Si 139).

 Tales soluciones no son mundanas, sino que son sacramentos. Porque hay un significado místico en una hoja, en una gota de rocío, en el rostro de un pobre (LS 233). Cada criatura lleva en sí misma una estructura específicamente trinitaria (LS 239) y son mediadoras de la vida sobrenatural, por eso son sacramentos (cf. LS 235).

Juntos:

Esta dimensión ecológica de la evangelización requiere solidaridad; ni el pueblo ni el gobierno por sí solos pueden promover un equilibrio socioambiental. Sólo puede lograrse con la colaboración de ambos.

Al tiempo que se agradece a las comunidades claretianas que ya han iniciado la celebración, se anima a las demás comunidades y apostolados a descubrir, vivir y cuidar la bondad del Señor en las maravillas de la Creación.

Fuente: P. S. Vincent Anesthasiar, CMF, Secretario General de JPIC