Bangalore, India. Todos estamos atravesando una época muy terrible y sin parangón. Ninguno de nosotros había experimentado algo parecido antes. La mayoría de los países siguen en modo de espera: las carreteras vacías; las mascarillas puestas; los compañeros que se convierten de repente en intocables; los invitados y visitantes no solicitados; las puertas y portones bien cerrados; los autobuses, trenes y aviones en sus refugios; las tiendas cerradas; las iglesias, templos y mezquitas sin culto; las escuelas y colegios impartiendo clases online; los hospitales llenos; las ambulancias se han vuelto un bien escaso; escasez de oxígeno, algo nunca oído antes; agonizantes solitarios sin sacramentos ni oraciones; cadáveres flotando en el Ganges, las orillas de los ríos convirtiéndose en cementerios improvisados, seres queridos y cercanos amontonados uno tras otro, en largas colas con fichas a la espera de ser incinerados; ¡entierros sin oraciones ni rituales ni familiares, a menudo a cargo de extraños y buenos samaritanos!

En esta época extraña e insólita, ¿dónde estamos como cristianos y como personas consagradas? ¿Tiene la vida algún sentido? ¿Tiene algún sentido nuestra consagración como cristianos o religiosos? ¿Dónde está nuestro Dios? ¿Ha desaparecido del panorama? ¿Se ha escondido? Estas son algunas de las preguntas fundamentales que preocupan a la humanidad hoy en día.

El Instituto de Vida Consagrada (ICL) – Sanyasa, un instituto único en la Iglesia india ha organizado una charla online de dos horas para ayudar a las personas consagradas a buscar respuestas a estas preguntas existenciales y dar sentido a su consagración. El Rev. P. Xavier Manavath, CMF, director fundador del ICL fue la persona de referencia que ayudó a los religiosos y religiosas en esta búsqueda fundamental, ya que compartió su sabiduría y su vasta experiencia sobre el tema «Dar sentido a nuestra consagración en tiempos de pandemia». Se inscribieron 802 personas consagradas junto con algunos fieles laicos y algunos más que participaron en el programa. También hubo una muy buena participación desde Sri Lanka, Filipinas, Italia, Tanzania, EE. UU., Emiratos Árabes Unidos y Nigeria. Esperamos organizar muchos más programas como estos extendiendo nuestro servicio a las personas consagradas a un círculo más amplio, aprovechando las ventajas del mundo digital.